Una de las técnicas más novedosas y avanzadas en el rejuvenecimiento facial es el tratamiento regenerador facial. Es perfecto para ser aplicado en pieles maduras que presenten signos de envejecimiento o en pieles jóvenes con visibles marcas de acné.
Este tratamiento permite lograr resultados excelentes y sin cirugía. Los especialistas recomiendan combinarlo con otros tratamientos que tengan la misma finalidad para unos resultados óptimos.
¿Qué es el tratamiento regenerador facial?
El tratamiento regenerador facial es muy seguro y, además, no produce efectos secundarios. El objetivo de este tratamiento es mejorar el aspecto, la firmeza y luminosidad de la piel.
Este tratamiento de regeneración celular permite tratar el proceso de envejecimiento de la piel. Para ello utiliza una sustancia que el propio cuerpo fabrica y que produce la regeneración de las células.
En el tratamiento se incluyen sustancias como vitaminas, aminoácidos y antioxidantes que aportan numerosos beneficios a la piel. Es muy utilizado también en lesiones de traumatología para tejidos duros o en zonas tendinosas.
Por su parte, la bioestimulación logra frenar el envejecimiento y produce una regeneración de los tejidos que reduce las arrugas y los surcos. Al mismo tiempo aporta vitalidad y elasticidad a la piel.
Los tres pasos del tratamiento regenerador facial
Este tratamiento de rejuvenecimiento facial se realiza en solo tres pasos:
- Se obtiene una muestra de sangre del paciente que se va a centrifugar.
- En esa centrifugación se obtiene la separación del suero en distintas fracciones, entre las que están las células que inician el proceso de cicatrización en una herida.
- Por último, se inyecta en la dermis del paciente a través de microinyecciones en el rostro, cuello y escote.
¿Con qué frecuencia se debe aplicar este tratamiento?
Los especialistas recomiendan que este tratamiento se repita entre tres y cuatro veces al año. En cualquier caso, siempre será el especialista quien determine la frecuencia con la que se puede realizar.
Las ventajas del regenerador facial
- Estimula la producción de colágeno y elastina de la piel.
- Mejora la coloración de la piel.
- Es muy seguro ya que la sustancia que se inyecta se extrae directamente de la sangre del paciente.
- Impide que se produzcan alergias o efectos secundarios.
- Tras el tratamiento, el paciente se puede reincorporar a las actividades rutinarias de inmediato.
- Se puede realizar en cualquier época del año, con la debida protección solar.